El mono relojero - Quirino Cristiani (1938)

Argentina | 10 min | Español

El mono relojero es una película de animación de Argentina en blanco y negro dirigida por Quirino Cristiani según guion de Constancio Vigil sobre su cuento homónimo que se estrenó en 1938. Las voces y otros sonidos fueron realizados por el actor Pepe Iglesias. (Wikipedia)

Quirino Cristiani, pionero de la animación e ilustre figura del genero allá en la Argentina, país que acogió al artista originario de Italia, ha sufrido la sombra del olvido por muchos de los aficionados y estudiosos de la animación, aunque de aquí a unos años atrás su obra y vida ha comenzado a ser estudiada y presentada al gran publico, pero a pesar de ello continua siendo un gran desconocido, la desaparición de casi la totalidad de su obra es la principal causa. El soporte utilizado por aquellos años, el nitrato de celulosa, aunque resistente, flexible, transparente y barato para la emulsion fotográfica era peligroso por ser inflamable, y la desaparición de película en 35mm arrebatada por el fuego fue un hecho habitual.

Cristiani puede vanagloriarse de ser el primer autor en realizar una película largometraje de animación –El apóstol, 1917- y de ostentar el primer largometraje animado con sonido -Peludópolis, 1931-. La desaparición de ambos trabajos, dejo a “El Principe Achmed” –Lotte Reiniger, 1926- como el primer largometraje animado.

Solo fragmentos de la obra de Quirino Cristiani nos ha llegado hoy dia, salvo El mono relogero -1938-, cuento que adaptó y produjo su propio autor Constancio C. Vigil, que por estar en posesión del escritor no sufrió la quema accidental, y que hoy dia sirve como muestra del trabajo de Cristiani.

El gran problema radica de que el cortometraje se trató de un encargo y las constancias de la obra de Cristiani -la sátira política- brillan por su ausencia, trantandose de una obra infantil –con moraleja incluida- que no acostumbraba a elaborar Cristiani. Además el autor italo-argentino tuvo que adaptarse a los diseños del español Federico Ribas –artista muy popular y admirado por aquellas fechas- que precisamente no era de una línea cercana a la de Quirino Cristiani.

A pesar de que El mono relojero es una obra impersonal que no define el talento de Cristiani, es lo que nos queda hoy dia para recordar y admirar al gran artista. (El ultimo necio)

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